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BREVE HISTORIA DE LA FUNDACIÓN DE LA ESCUELA DE PROFESORES Y PRECEPTORES DE LA REPÚBLICA DE BOLIVIA, HOY ESCUELA SUPERIOR DE FORMACIÓN DE MAESTROS “MARISCAL SUCRE”
La creación de la Primera Escuela de Profesores y Preceptores de la Republica y sus intentos de consolidación datan desde 1835, el Gobierno de Santa Cruz dictó un decreto por el que se crea el Colegio Normal de la ciudad de la Paz que debía funcionar incorporado a la flamante Universidad de San Andrés. Se nombró como primer Director al literato español Joaquín Mora, pero debido a muchas razones, tuvo una existencia efímera y pasajera.
Posteriormente, en el Gobierno del General Belzu, en 1851, bajo el Ministro de Instrucción Pública, Dn. Agustín de la Tapia, en su memorial presentado al Congreso, indica que su proyecto para establecer una Normal destinada a la formación de maestros, fracasó debido a que en diferentes veces se convocó a concurso y no hubo un solo individuo capacitado. “Este es el motivo porque carecemos de buenos maestros”.
En el Gobierno de José María Achá, en 1864, el Ministro de entonces Diego de Monroy, presenta su memoria clara y honrada la pavorosa situación de la Instrucción Pública de Bolivia y la imprescindible necesidad de establecer Normales, decía: “En 39 años de existencia independiente, han regido la Instrucción Pública, diferentes leyes orgánicas sin que ni una sola haya sigo conseguido difundirla por todo el territorio de la nación”. Y luego añade: esparcidas las pocas escuelas en el vasto territorio de la República, lejos de la vigilancia del gobierno, yacen allí abandonadas, olvidadas de la autoridades, entregadas a instituciones sin mérito, sin pruebas de exámenes escolares que autenticen la preparación y el trabajo del regente, y por último sin inspección alguna”.
Refiriéndose al establecimiento de normales decía: “El establecimiento para formar institutores idóneos de instrucción primaria, es exigencia que demanda la falta casi absoluta del personal competente en el conocimiento de los métodos de enseñanza. Aspiramos a hacer del magisterio una profesión para formar hombres dedicados, que conserven sus cargos aún entre los trastornos políticos que llevan con el triunfo, el cortejo de proselitismo y empleomanía”.
En el Gobierno de Daza en 1877, el Ministro de Instrucción, Dn. Agustiín Aspiazu, insiste en la creación de una Escuela Normal. Asimismo el Gobierno de Gregorio Pacheco, en 1888, se sigue clamando ante los poderes públicos el establecimiento de una Normal en la República ante el cuadro cada vez más tétrico de la Instrucción Pública del país, así lo demuestra el Ministro García en su memoria elevada ante el Congreso. “No será aventurado asegurar que todas las iniciativas intentadas en la Instrucción Pública han fracasado, dejando burladas las generosas aspiraciones de los gobiernos y legislaturas que se preocuparon de esta materia”.
El Plan curricular consiste en las siguientes materias: Castellano, Cálculo y Matemáticas, Geografía, Historia e Instrucción Cívica, Ciencias Físicas y Naturales, Francés, Pedagogía teórica y Práctica, Gimnasia, Dibujo, Trabajos Manuales, Caligrafía, Música: canto, violín y armonio (Escuela Nacional de Maestros, 1959).Finalmente un 6 de junio de 1909, bajo el Gobierno de Montes y el Ministro Daniel Sánchez Bustamante, se crea la Escuela Nacional de Maestros, que viene a desempeñar una de las funciones esenciales de la Educación Boliviana. Se funda en la ciudad de Sucre con el nombre de Escuela Normal de Profesores y Preceptores de la República. Sustentado en la Orden Suprema de 28 de marzo de 1909, que contiene 13 artículos, y 25 alumnos convocados a nivel nacional, sujeto a una evaluación y compromiso con el Estado, como becarios.
Breve evolución histórica.
Su Organización a través de los primeros 50 años de vida institucional, su trayectoria e hitos importantes que la preceden en el devenir de su historia, en esta breve síntesis cronológica:
En 1910 se admite en la Escuela Normal a señoritas alumnas para su formación. A solicitud de los Padres. La coeducación fue tolerada por el Gobierno, pero no fue reconocida oficialmente hasta 1913 (ENM, 1959; Rouma, 1931).
En 1918 se crea la Sección de Kindergarten, (Primera etapa) bajo la Dirección de Faria de Vasconcellos, hasta 1922; y en 1939 se reabre en la Dirección de Saúl Mendoza Mendoza.
En 1922, se separa la formación para varones y señoritas.
En 1934, nuevamente se une al “Instituto Nacional de Ciencias de la Educación”.
En 1936, se crea la Sección Musical, bajo la Dirección del Profesor, Vicente Donoso Torres. Iniciaron el planeamiento de programas los profesores Esther Deuer y Mario Estensoro V.
En 1937, el 11 de mayo se crea el Departamento de Secundaria con 4 secciones:
Filosofía y Letras, Matemáticas y Física, Historia y Geografía, Ciencias Biológicas y Química.
En 1938, pasa a depender del Ministerio de Educación y Dirección General de Educación.
En 1942, se crea la Sección de Educación Doméstica, se crea bajo la Dirección del entonces Profesor, Saul Mendoza Mendoza.
1975, la Ley de Normales del Gobierno de Hugo Banzer convierte a la Normal en Escuela Normal Integrada Mariscal Sucre.
1994, Ley de Reforma Educativa transforma a la Normal en Instituto Normal Superior Mariscal Sucre.
1997, por Resolución Secretarial No. 78, de 14 de Febrero de 1997, se transforma a la Normal en Instituto Normal Superior “Mariscal Sucre”.
1999, sobre los cimientos de la prestigiosa Escuela Nacional de Maestros, se funda la Universidad Pedagógica Nacional “Mariscal Sucre”.
2009 por Decreto Supremo Nº 156, Artículo 3: I. La Universidad Pedagógica “Mariscal Sucre” con sede en la ciudad de Sucre, se transforma en una institución de educación superior universitaria, para la atención de la formación continua y estudios de postgrado en ciencias de la educación y especialidades en los grados de diplomado, maestría y doctorado. II. Como parte de la estructura de la Universidad Pedagógica “Mariscal Sucre”, se crea la Escuela Superior de Formación de Maestros “Mariscal Sucre”, encargada de la formación inicial de maestros.
Finalmente, Ley de la Educación Nº 070, “Avelino Siñani-Elizardo Pérez”, promulgada en la gestión 2010. En la Sección I, artículo 31: Formación Superior de Maestros y Maestras. Constituye el proceso de formación profesional en las dimensiones pedagógica, sociocultural y comunitaria, destinada a formar Maestras y Maestros para los subsistemas de Educación Regular, Educación Alternativa y Especial, en la cual la Institución desarrolla su proceso formativo contribuyendo de esta manera a la consolidación de nuevo modelo educativo socioproductivo
Valentina Ramirez
Responsable de Biblioteca “Georges Rouma”
Noviembre, 2016